martes, 29 de diciembre de 2009

"Me limaron las ruedas"

“Los maravillosos años”, serie norteamericana de los años '80 y principios de los ‘90, nos muestra como su protagonista, Kevin Arnold, debe enfrentarse día a día a su adolescencia. Era un chico de clase media cuyas jornadas no terminaban siempre de la manera más feliz. Aquí se encontraba, creo, el punto más fascinante de la serie, en el que nos sentíamos identificados: Kevin sufría al igual que todos, se avergonzaba por cosas similares y sus padres no eran millonarios.

“Los maravillosos años”, revelaba el lado humano del personaje distanciándolo, por ejemplo, de los chicos perfectos de la serie Beverly Hills 90210, que se emitió varios años más tarde.

Por otro lado, llegó un momento en el cual yo -que adolecía en mi propia realidad-, me cansé de ver las pálidas de Kevin (ya tenía bastante con las mías) y dejé de verlo. Entonces podría decir, que en mi caso, el fuerte de la serie terminó siendo la fuente de su fracaso.

El otro día me sorprendí a mi misma pensando en esa serie y en cómo Kevin se avergonzaba del auto chatarra que tenía su padre. La familia de Kevin no era de esas que compraban un auto 0 km cada cinco años, las cosas se conseguían difícilmente y en el caso de ser logradas eran vistas como algo surrealista, glorioso.

Repasé un poco mi infancia y enseguida me sonreí al hallar mi “momento Kevin”.

Yo tenía nueve años e iba al club con mi familia todos los fines de semana. Allí practicaba patín artístico sobre ruedas ya hacía más o menos unos dos años. Con mi profesora de patín insistíamos siempre a mis padres (vanamente) para que se decidiesen a comprar las ruedas requeridas para este deporte. Las ruedas profesionales eran chiquitas y blancas, las había distintas para cada tipo de superficie. Luego, les seguía en calidad y precio las azules y por último, las negras. Las mías eran naranjas. Y de diámetro exagerado.

Mis viejos, demostrando poco tacto, me regalaron unos patines de bota estrafalaria, en colores azul y amarillo (y eso que yo soy de River). Ni por lejos se asemejaban a las hermosas botas de cuero blanco que tanto anhelaba.

Es de conocimiento popular lo sensible que son los chicos a esa tierna edad, cómo se alejan de todas las diferencias (así como lo crueles que pueden ser con ellas), y cómo intentan parecerse lo más posible a la manada.

Bueno, entonces entenderán cómo me sentía yo cuando veía llegar a mis compañeras de patín con sus botas blancas, cubre botas, ruedas híper-profesionales y sus porta-patines, esos bolsitos especiales que las hacían ver divinas con un patín colgando de cada lado del hombro.

Yo llevaba (escondiendo entre las piernas) un bolso viejo, rectangular, escocés, de manijas de cuero roto. Uno de esos bártulos añejísimos que fue hallado por casualidad en algún rincón de la casa. En fin, un verdadero desastre!

Un día no soporté más e increpé a mi padre: "estas ruedas no sirven para nada; yo necesito las blancas, esas chiquitas". Mi papá miró de arriba a abajo mis patines y, aunque convencido de que nada malo hubiese con ellos, se los llevó con la promesa de solucionar mi problema.

A las pocas horas volvió. El brillo en su sonrisa era una exclamación de victoria. Me dijo entre canchero y orgulloso: “Las querías más chicas…acá las tenés más chicas”. Me costó unos segundos comprender lo que había sucedido, pero pasado el shock inicial pude entender: las había limado!!!!

Lo noté tan contento con su trabajo de artesanía que, por piedad, me reprimí las ganas de gritarle: "pero vos sos loco, cómo me vas a limar las ruedas!".

Él estaba segurísimo que si uno patinaba bien, patinaba bien con cualquier cosa: "mirá a Vilas sino... él juega bien con la raqueta de madera, con la de grafito, juega bien con todas!".

Le respondí indignada: "pero papá, en los tiempos de Vilas la madera era lo mejorcito, todos jugaban con madera, porqué no le alcanzás una raqueta hecha de paja y alambre a ver cómo juega, eh, eh?!".

Cuál versión propia de "me cortaron las piernas" (Maradona, 1994) yo exclamaba: "me limaron las ruedas!".

No sólo seguía teniendo las ruedas anaranjadas con ese material que se adhería a la pista, sino que mi vergüenza alcanzó niveles exacerbados cuando tuve que llegar a clase con mi elemento deportivo "recortado" en casa: Kevin un poroto!

Un día, al fin, se rompió mi bota colorinche; con mi profesora nos abrazamos en un salto de alegría.

Era mi oportunidad. Había que conseguir las botas blancas.

Y así fue, me fui con mis padres hasta Carapachay (no sé porqué sólo se vendían ahí) y las compramos. Yo estaba feliz con mis botas nuevas.

Las ruedas no las conseguí nunca. Siguen limadas.


miércoles, 23 de diciembre de 2009

sábado, 19 de diciembre de 2009

Desquiciada


Psicóloga:
¿Quién era que decía esa frase de Sartre?
Esa que decía que tenemos que hacer lo que podemos con lo que hicieron de nosotros...

Yo:
?!?!?!


Psicóloga:
Vos eras?


Yo:
Sí, sí, YO era!!! La recuerdo muy bien esa frase: "somos lo que hacemos con lo que hicieron de nosotros". Perooo... cómo es eso de que si ERA yo la que lo decía?? Qué otra paciente podría haber sido sino? Algún otro te cita a Sartre? ¿Qué, te estás confundiendo los pacientes ya?! ¿Cuántos pacientes tenés? ¿¿Acaso paso tan desapercibida que no se recuerdan mis comentarios??!! Eh?? Eh?!

Bueno, la verdad no sé qué me pasó, pero eso de que no recuerde qué le dije cuando pago una mini fortuna y que dé igual si lo dije yo o algún otro paciente... no sé, me desequilibró un poco, un poquito nomás...

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Horóscopo revolucionario

Ayer estuve leyendo a unos teóricos de la comunicación de los '70 y comentaban, dentro del paradigma de la dependencia, que los horóscopos de las revistas de entonces eran conservadores y funcionales al sistema de dominación existente. "Demasiada teoría conspirativa", pensé. ¿No será mucho pensar que en esos pronósticos semanales se puede transmitir algún tipo de ideología??

En fin, el leer esto me hizo reír un poco y pensar cómo sería un horóscopo no funcional al sistema, un horóscopo revolucionario (¿?). Me parecía bizarra y muy capusottiana la idea de que existiese un horóscopo conservador (según estos intelectuales lo son todos) y otro revolucionario (el inventado por mí). Y poniendo la imaginación al poder (pobre imaginación) tratando de hacer un horóscopo trucho, de esos que de tan truchos sentís que te están boludeando y aún así no comprendés porqué seguís leyendo, pero seguís, de esos al mejor estilo tv-guía (pero con contenidos de extrema izquierda), de esos que de tan absurdos dan vergüenza ajena. Y bueno, y lo escribí y quedó algo, más o menos, así:


Horóscopo revolucionario (diciembre 2009)

Ocupaciones y negocios: Esta semana te sentirás un tanto irritado por las llamadas de atención que te hace tu jefe de manera constante. Trata de tomar distancia y no reaccionar frente a los abusos de poder que éste sicario del capitalismo te propina sistemáticamente. Mientras Mercurio este atravesando tu signo trata de dejar en claro que de tu trabajo el dueño se lleva la ganancia. Para poder explicarle la teoría de la plusvalía lleva contigo siempre, como si fuese tu Biblia, "El Capital" de Karl Marx, así podrás justificar todos tus argumentos.

Amor: pensaste que tu vida iba a ser una primavera de colores, pero no. Tranquilo. Pasaste la etapa idealista y ahora te enfrentas cara a cara con la realidad. El velo se ha corrido y ahora ves claramente que tu chica posee una ideología distinta. Ella es rica y vos no. No te desanimes. La relación va a sufrir varios embates durante este mes ya que Venus se encuentra abandonando tu signo. Tus encantos están en declive. Consejo: usa tu arma secreta: morral verde militar y campera haciendo juego, no falla!!

Salud: el estrés laboral, el smog de la ciudad y los problemas con tu pareja te están haciendo sentir un tanto cansado. Empezá por hacer una dieta nutritiva, no hace falta que dejes el habano. Da lugar a que la música entre a tu vida: Silvio Rodríguez, Aute y León Gieco son excelentes alternativas para distenderte un rato.

Sorpresa: Esta semana te encontrará inmerso en la masa, entre estudiantes de sociales y obreros sindicalistas camino a Plaza de Mayo. No te desalientes: canta fuerte y con el puño en alto! Hasta la victoria siempre!

viernes, 20 de noviembre de 2009

Tic - Tac...

Estaba esperando que nos encontremos vos y yo
porque sé que hay una fuerza cósmica que nos va a arrastrar a vernos las caras otra vez
pero no puedo descubrir en qué momento ni lugar, sólo sé que va a pasar
Así que vivo y mientras vivo espero
Hay una parte de mi que se mantiene latente, agazapada e impaciente
hay una cuenta regresiva en algún lugar, yo lo sé.
dando vueltas...

Y cuando ese último sonar nos capture
nos encontrará maravillados y extasiados
y sólo podremos quedarnos ahí, mirándonos sin aliento, absortos,
tímidos, torpes y erráticos,
y extrañamente sorprendidos como si se tratase de un encuentro no pronosticado. Pero sí.
Y nos aferraremos a ese fugaz instante
temiendo que por tan deseado no se evapore tan rápido.
Y sabremos que ese, por fin, era nuestro momento tan anhelado.

Somos los mismos pero ya no. Sólo es nostalgia y desencanto.
Será que los ecos del pasado siempre llegan distorsionados.
Así que te volverás a ir y te dejaré ir
porque, yo sé, otros relojes están empezando a latir...

jueves, 19 de noviembre de 2009

Espejismos si los hay!!!


Tenía 18 años cuando me encontraba tirada sobre mi pareo colorado en Playas del Este, Cuba. Desde la orilla del mar turquesa vi acercarse a trote lento por las claras arenas del Caribe a un mulato que me miraba intensamente desde piedras verdes exhibiendo una generosa sonrisa blanca. Inmediatamente, pensé en estar siendo víctima de algún espejismo... pero no. El hombre musculoso seguía dirigiéndose hacia mi. Lo miraba. Me miraba. Lo miraba. Por fin llegó a mis pies, me tapó el sol con su sonrisa, y luego de una introducción acerca de mi país de origen me preguntó, sin más, si alguna vez había probado el agua de coco. Le respondí que no. Él, entre sorprendido y alarmado, me dijo que no podía ser, que ya mismo me traía una para que no abandonara la isla sin degustar semejante delicia. Entonces lo vi, una vez más, correr por la paradisiaca playa hasta la palmera más cercana y entrar a dar brincos que lo ayudaban a trepar por el tronco con una habilidad digna de una pantera. Estaba presenciando un espectáculo increíble mientras trataba, fuera de mi, de capturar esa secuencia y convencerme que era real: -"my God! tendrían que hacer torneos de hombres guapos trayendo cocos"- pensé. Y sin ofrecer respiro que me ayudase a corroborar lo que mis pupilas estaban deglutiendo, el amable hombre cortó el coco (no sé con qué, con una piedra creo), y de manera súper gentil lo trajo para que pudiese yo, por fin, probar el agua de este fruto tropical en ese oasis caribeño.
Lo miré maravillada, me refresqué, le agradecí, y lo vi irse feliz caminando por la costa. Su imagen se esfumó entre olas de vaporoso calor. La secuencia fue tan veloz que sólo me restaba el coco en mi mano para corroborar que lo sucedido no había sido algo fantaseado por mi mente mientras cerraba los ojos dormida al sol.



sábado, 14 de noviembre de 2009

Mi cuarto intermedio: los prospectos médicos


Algunos para distenderse leen revistas, diarios que se reparten gratuitamente en los subtes, catálogos de negocios o folletos con las últimas ofertas del supermercado, cualquier cosa que distraiga y relaje a la mente cuando uno ya no tiene muchas ganas de pensar. Yo, en cambio, leo prospectos médicos. Sí! Amo leer los prospectos medicinales cada vez que se me receta algo!! Sí bien es un habito medio freak (lo acepto) siempre me gustó y, aunque muchas veces no entienda nada de lo que se dice, me empeño en leer cada párrafo meticulosamente.
Sigo obsesivamente una ruta dada por el mismo diseño del folleto, empezando por las Indicaciones. Ahí mismo me fijo si me recetaron bien y si lo que voy a consumir está en relación con mi malestar (ese momento, no sé porqué, ya me pone contenta). Después, voy a Acción Farmacológica, donde se me explica bien qué es cada droga y sobre qué actúa, entonces ya comienzo a poner en relación a estas drogas con otras que me recetaron anteriormente creando un jueguito tonto que me distrae y pone en relax: "aaahh, la betametasona, siii, claro, ¡si ya me la habían dado para la alergia!". Luego, paso por Posología y Forma de Administración y soy feliz. Pero, sin dudas, el momento que me produce más adrenalina es al adentrarme en la zona oscura y engañosa de Reacciones Adversas. Estas son leídas con la desconfianza y devoción con la que se leen los horóscopos cual profecias indomables. Ya me ha pasado de leer reacciones adversas muy apocalípticas como prevenirme acerca de una posible "ROTURA DE TENDÓN DE TALÓN"!!!! "Ah, nooooooo, yo no leo más esta mierda, toda la puta semana pendiente de cómo piso y mi fragil talón, ésto sugestiona!!". A partir de ese episodio ya no muero por leer más este segmento ya que creo completamente en el poder de la mente y la auto-sugestión. Al finalizar todo el recorrido del prospecto, "me tomo 5 minutos , me tomo un té "-como decía Té la Virginia"- y termino mi pausa para activar nuevamente el cerebro y continuar el día.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Logoterapia

Esta gripe no se va, así que decidí ir al médico clínico. Saqué turno con el único médico que apareció viviendo en mi barrio en la cartilla on line de la prepaga. No pedí referencias ni recomendaciones, sólo esperaba no encontrarme con un tarado. Llegué y en la sala de espera había dos viejas entregadas a la gran chachara, los muebles eran antiguos, las paredes no se pintaban hacía un siglo y como era planta baja no llegaba luz natural por lo que había un velador prendido a pesar de ser las 4 de la tarde. Todo me "daba a viejo" y me quise matar del sólo pensar que el Doc. sería un hombre anticuado con una medicina poco aggiornada y que su incipiente sordera no le dejaría oír mis latidos por el estetoscopio.

En fin, ya estaba jugada.

Me atendieron rápidamente, el Doc contaba unos setenta y pico pero se lo veía erguido y jovial. Era alto, canoso, de ojos azules vivaces e intensos. Lo primero en llamarme la atención fue la manera cálida de recibirme: beso en la mejilla y sonrisa (eso en un médico es bastante teniendo en cuenta que suelen imponer una distancia escalofriante). Me sentí a gusto, el Doc no llevaba delantal sino su ropa de calle, tenía un look más identificado con el de un profesor intelectualoide de la Universidad que un médico clínico en actividad privada: sweater escote en V de lana marrón y pantalón de corderoy.

Yo:
Sí, venía porque tuve una gripe fuerte hace dos semanas y sigo congestionada. Puede ser alergia, no?,¿o tendré las defensas bajas?- siempre empiezo tirando una batería de preguntas-.

Médico Clínico:
Qué edad tenés?

Yo:
Treinta.

Médico Clínico:
¿Casada? ¿Con hijos?

Yo:
Soltera. Sin hijos.

Médico clínico:
¿Puede ser que andes mal emocionalmente por algún motivo reciente?

Yo:
Bueno... (no sé porqué sacó esa conclusión luego de haberle dicho que a mis 30 no estaba casada ni con hijos, pero bueh...). Fue un año raro, sucedieron algunas cosas, puede ser que haya estado baja de ánimo.

Médico Clínico:
¿Algún problema amoroso últimamente?

Yo:
mmm...nop. Bueno, me dejé de ver con alguien hace un tiempo, pero ya va a ser un año que no nos vemos, así que no creo que incida en nada.

M.C.:
¿Problemas en tu casa?

Yo:
-Ahora sí, ya me parecían demasiadas preguntas personales para ser un médico clínico-. Bueno...si, lo habitual. La convivencia es difícil, los problemas de siempre... (A decir verdad, TODO me molesta en mi casa).

M.C.:
¿Haces algún tipo de terapia?


Yo:

Sí. Psicoanálisis lacaniano. Hace unos cuatro años.

M.C.:
Y ves cambios?

Yo:
En algunas cosas si y en otras no tanto.

M.C.:
¿Pensaste en cambiar de terapeuta?

Yo:
Sí, y de terapia también!! Quiero hacer terapia sistémica, terapias más cortas, me parece que el psicoanálisis no es para mi. (Vi que el Doc estaba en sintonía con mis inquietudes así que le agregué datos a mis respuestas para colaborar con su interrogatorio y mostrarle mi voluntad de cambio) Ah! también hice yoga para salirme de lo tradicional y ver si por el lado del cuerpo y la meditación encontraba nuevas formas para sentirme mejor.

M.C.:
¿Y como venís de autoestima?

Yo:
Ah, noooo -no aguanté más, el hombre iba directo al grano y yo no veía la hora de que me hiciese toser un poco, me examinara los ojos, me preguntara si hay alérgicos en mi familia y me recetase dos resfrianex por día-. Disculpe, pero Ud. es psicólogo??? por no decir...VIDENTE?!!!

M.C.:
Y... más o menos. Practico la logoterapia, una psicoterapia creada por Viktor Frankl. Trabajamos con las personas teniendo en cuenta su completitud, como individuos físico-psico-sociales.

Y dejando fluir su costado narcisista me explicó: ves ese cuadro? bueno ese es un premio que gané por la Fundación Viktor Frankeiln en Viena. Él fue un psiquiatra que estuvo preso en campos de concentración nazi y dentro de esa experiencia observaba cómo el ser humano buscaba encontrarle sentido a la vida.

Yo:
Y... jodido, no? Digo, encontrarle sentido a la vida en medio de un campo de concentración nazi... (Ahí, el Doc ya había capturado mi atención totalmente. Llegué a casa y lo primero que hice fue googlear a Frankl y leer todo lo que se me aparecía en pantalla acerca de la logoterapia).

Pero M.C. no perdía el hilo del todo y arremetía de nuevo incrustando su mirada en la mía sin parpadear:
Entonces...cómo estás de autoestima?

Yo:
(Risitas nerviosas). Yyyy...je, jeje, je... (Dale Sole, decí algo, estás quedando como una boluda- pensé-). Bueno, y...de autoestima vengo para atrás. -"Este HDP, es vidente!!! Y dale meter el dedo en la llaga y dale... cuándo será el momento en que agarra el puto estetoscopio y me haga abrir la boca y hacer "aaaaaa""-. Al desnudo, descubierta y casi llorando le dije: pero ahora estoy mejor, eh? Es cuestión de encontrarle lo positivo a todo.

MC:
No, a todo no. Por que todo no es positivo. Hay que saber diferenciar lo bueno de lo malo, lo malo no tiene nada de positivo, hay que evitarlo.

Yo:
Bueno, si...yo me refería a superar la adversidad y quedarse con lo bueno de esa experiencia de auto-superación.

MC:
Bueno, eso podría ser. Pero eso sería más bien la doctrina del sufrimiento: tratar de encontrar lo bueno en lo malo y aprender a sentirse bien con eso.

Yo:
Mierda!!! Nunca lo había pensado así.

Al fin llegó ese bendito y esperado momento en el cual el Doc agarra el puto estetoscopio y hace lo suyo dejando de escarbar en mi psiquis. La logoterapia me tomó por sorpresa. El Doc resultó ser un capo que me mandó a hacer varios análisis de rutina. Yo ansío volver en breve, pero esta vez, preparada para una charla profunda e introspectiva y con una lista de preguntas acerca de la logoterapia y sus experiencias con Viktor Frankl.



*V. Frankl era un neurólogo y psiquiatra austriaco que en su juventud se carteaba con Freud quien le publicó varios de sus artículos. Luego de su experiencia en los campos de concentración nazi y de haber creado la Logoterapia basada en la "voluntad de sentido" siguió su vida destacándose profesionalmente, al mismo tiempo demostró ser un gran escalador y piloto de avión, consiguiendo su registro a los 67 años de edad.

jueves, 22 de octubre de 2009

Frankenstein Cibernético

El ciber-espacio nos invita, casi que nos exige recrearnos en sus redes. Y que mejor que las web 2.0 para inventarnos alias, vidas paralelas, monstruos virtuales que buscan un lugar de atención entre sus mil "amigos". Las web 2.0 es un lugar donde el ego estalla y se generan vidrieras de uno mismo, donde se exhibe un recorte de nuestro mundito para mostrar y donde también, nos convertimos un poco en voyeur de otras vidas. Un universo nuevo y tecnológico se abre expandiéndo nuesto yo, siendo nosotros mismos pero sin serlo: es lo que somos y lo que quisiéramos ser. Lógico, hay excepciones, todo depende del uso que se le dé.

Pero en general, hay ciertas actitudes que nos evidencian lo anteriormente mencionado, como por ejemplo: las pendejas que se sacan la auto-foto medio en tarlipes frente al espejo de algún boliche, los que cambian, casi maniáticamente, su estado y nos cuentan a cada minuto que tan deprimidos están, los enamorados, los estudiosos, los que buscan pareja, los que están de levante o de trampa... En fin, facebook es una gran extensión de la vida misma, es un mundo paralelo donde uno puede tener tantos "amigos" como quiera y sentir que puede compartir y estar menos solo que en su propia realidad. Vivimos - o sobrevivimos- en un mundo fast food, donde priman las urgencias y escasea el tiempo para generar vínculos duraderos. Hoy día, uno se relaciona a través de la tecnología, es decir, que te enterás lo que le pasó a tu vecino por el noticioso de la tarde, de cómo está el clima por la TV (no hace falta salir al balcón) y te haces amigos mediante la pantalla de la compu.

En fin, este interludio solo es excusa para contar el colmo de los efectos colaterales del facebook. El sábado pasado me fui con una amiga, a la que no veía hacía mucho tiempo, a un bar con el fin de ponernos al día. Entonces, mi amiga me contó que se había armado una especie de frankenstein cibernético, es decir, una cuenta ficticia en facebook. Me dijo que era un chico (vamos a llamarlo "Nico"), y que lo había armado a piacere: era psicólogo, actor, con unos años más que ella, con gustos musicales afines, le apasionaba el cine, tenía mucha onda, en fin...el chico ideal. Y así como en tiempos pre-web 2.0 una se auto enviaba flores a la oficina para llamar la atención de su "chico" al tiempo que leía aquella tarjetita que llegaba adjunta al ramo y que una misma había escrito horas antes; ese triste, -aunque divertido- mecanismo de seducción desesperado se reproduce en la web pero de una manera mucho más efectiva. Nico es un robot dulce y amoroso que mi amiga pone en acción cuando sus chongos andan medio desaparecidos. Ella lo creó bajo la resentida misión que pasó a denominar : "el polvo has de comer". Y lo mejor de todo es que... funciona!!!

Amiga:
Boludaaa, pero si vos lo tenés de "amigo". Viste ese chico, ese super dulce que siempre se acuerda de mi, de mi cumpleaños, que no para de decirme lo bien que salgo en todas las fotos y lo hermosa que estoy día a día?

Yo:
Paraaa... Nico?!! Justo te iba a preguntar por ese chico, es un bombón!

Amiga:
Bueno..."holaaaaa"- haciendo ademán de saludo con la mano- Nico soy yo.

Yo:
Nooooooooooooooooo. Con razón! No podía ser tan perfecto ese chico, tan caballero, tener tanta onda. Tenía que ser una mina, lógico! Dice todo lo que queremos oir!

Amiga:
Y te digo que funciona, eh? Lo pongo a postear un día y al siguiente tengo a todos mis chongos llenando el celu de mensajes; es psicología básica, son así!

Yo:
Jajaja. Y, yo usaría a Nico para misiones distintas, los chongos que se maten! Pero lo usaría para husmear en las vidas de aquellas personas que me muero por saber en qué andan y no los puedo agregar desde mi perfil, es decir, desde mi identidad real! Prestame a Nico, por favor, así polulo por los muros... Paraaaaaa, nos fuimos al carajo! Todo lo que estamos diciendo/ haciendo es bajísimo, esta mal, bah... estamos mal, no?!

Amiga:
Pero no, esta re bien!!! Don't worry, be happy. Es más yo lo tomo como un trabajo de campo; podés creer que mi criatura tiene más "amigos" que yo, tiene más vida social que yo!!! Lo invitan a todos lados, las minas se lo quieren levantar, y te das cuenta cuán caretones son algunos porque le escriben en el muro haciéndose los amigos y el flaco, no existe! El otro día una mina le posteo que lo había visto en un recital (¿?)

Yo:
Perooo....vos le pusiste foto?

Amiga
No, tiene la foto de los ojos nomás, son los ojos de un actor que me en-can-ta!

Yo:
Tengo que admitir que sos muy grosa y que las minas están re calientes porque mirá que mentir así, tan descaradamente, qué vio... un fantasma?!

Amiga:
Bueh, no hablemos de mentiras cuando planeamos nuestras maquiavélicas formas de obtener lo que queremos. Lo cierto, es que Nico tomó vida propia y ya tiene su lugar ganado dentro del planeta facebook.

Yo:
Grosso, la internechi, grosso.

viernes, 9 de octubre de 2009

Chau, negrita querida

"Tantas veces me mataron, tantas veces me morí, y sin embargo, estoy aquí resucitando"



Los artistas no mueren, se van de gira.
Buen viaje, negra linda!

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Glorioso Tarantino

Glorioso Tarantino en "Bastardos sin gloria"!!! Gran parodia del cine acerca de la 2º Guerra Mundial (haciendo referencia a Pabst y a Hollywood), mechada con una banda sonora exquisita y esos toques de spaguetti western que caracterizan a sus películas. El film distorsiona la realidad creando una especie de revancha judía que estalla en lo bizarro. Dan ganas de hacer pogo sobre el final!!! No sé...me encantó!!!

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Manicomio itinerante

Al volver a casa una noche oscura de lunes escuché un diálogo muy poco común (aunque me resultase familiar debido a los millones de thrillers psicológicos que he visto a lo largo de mi vida). Levanté la vista para contemplar quién expresaba tanta angustia en palabras. Ahí mismo, vi a una pareja caminar abrazada resguardándose del frío invernal. Ellos contaban unos cuarenta y tantos; vestían jean y camperas impermeables. Ella dejaba sus rulos sueltos y desordenados, mientras él la tomaba del brazo. Los vi pasar rápido, caminaban en dirección opuesta a mi y, por unos pocos segundos, logré escuchar el sonido de sus voces. Entonces, los acompañé con la mirada, me quedé quieta, me di vuelta, los vi pasar, quise seguir escuchando pero ya no lograba oír nada, las palabras se esfumaron y me sentí rara.

Ella decía colmada por el pánico: "me ataron, me golpearon, me violaron". Lloraba desesperada, lloraba al temblar. Su voz se ponía más aguda y quebradiza.

Él la llevaba fuerte del brazo, la interrumpía y en voz calma, muy calma y consoladora, la tranquilizaba: "nadie, nadie te ato, nadie te golpeó". Pero la voz de ella, ahora casi inaudible, le respondía entre cansada y enfurecida: " Sí, si que pasó, si que me ataron...".

Al rato, la pareja de espaldas, volvía a ser una figura recortando el fondo de las calles porteñas.

Yo no supe qué hacer. Podía buscar a algún policía y decir lo que había escuchado, decir que a esa mujer la estaban torturando, que ese hombre que la llevaba del brazo era un sádico psicópata y que el destino me puso ahí para que hiciese algo, que ella había hablado adrede para que yo escuchase e hiciese algo. No quería que ella fuese el próximo titular de Crónica y decir: "yo la vi, yo sabía y no hice nada".

Por otro lado, podía pensar lo más sensato y razonable: que la señora en cuestión estaba loca, que era mitómana o esquizofrénica, y que el pobre hombre a su lado la amaba profundamente y soportaba con dolor verla sufrir hundido en una triste impotencia.

Eran dos películas distintas: una era un drama europeo y la otra, el mejor suspenso yanqui. Sólo sé que me decidí por el drama, quizás para tranquilizarme un poco y poder seguir camino a casa. Así y todo, esa imagen cual película de hollywood -pero en vivo y en directo- me dejó muy movilizada. Si a esa mujer le había sucedido o no lo que contaba lo mismo daba, ella actuaba como si hubiese ocurrido, ella estaba tan segura de haber sido víctima de una vejación tal, que el miedo en sus palabras era cientos de veces más creíble que cualquier interpretación realizada por una actriz consagrada; es que la mujer en cuestión no estaba actuando, ella estaba convencida y sentía lo que estaba diciendo. Ella estaba siendo torturada por sus recuerdos, ya sean éstos reales o falsos.

Yo volví a casa y traté de eliminar los distintos flashes que invadían mis pensamientos con escenas violentas. Esa noche como tantas otras, mi hermana llegó sonriendo; venía del videoclub y agitaba una película con su mano. Yo no pude más que preguntar: ¿es de suspenso???

domingo, 16 de agosto de 2009

Me robó un trava!!!

Nueva salideta con los sospechosos de siempre: Juan y Marce.

Mismo antro espirituoso: Sonoman.

Horario habitual de fin de semana: sábado 5:00 am.

Bebida no tan habitual de fin de semana en mano: gin tonic, cerveza y speed con vodka.

Tres tristes tigres, tres...

6:00 am: Juan tambaleaba; Marce y yo charlábamos amistosamente y Juan desaparecía de nuestra visión panorámica de forma misteriosa.

6:05 am: Marcelo recibía un mensaje de texto a su celular. Era de Juan: "Me fui. Necesito caminar para que me baje el alcohol". Respuesta de Marce: "Pelé volvé, no te hagas la histérica".

6:10 am: Pelé (Juan) volvía sacado: "¡Me quiso robar un trava!". Con Marce en principio entendimos cualquier cosa, un poco porque Juan no modulaba y otro poco porque nuestras neuronas no hacían sinapsis. Cuando al fin entendimos, intentamos vocalizar un alcohólico: "Ehhh????". Para luego, más vivazmente, poder preguntar: "¿CÓMO?¿Cuándo? Si te fuiste hace diez minutos!".

Juan: "Recién!!! Estaba caminando para tomar aire y bajó un trava de un taxi, se me acercó levantándose la remera, me mostró todas las tetas hechas mientras me decía libidinosamente 'vení papito, tocame toda', me abrazó, me agarró por detrás, me apoyó su bulto en mi culo y cuando hice un movimiento para zafarme me dí cuenta que me faltaba la billetera. ¡Me había metido la mano en el bolsillo y me había manoteado a velocidad luz! Le dije 'salí de acá hijo de puta, te voy a matar. Devolveme ya la billetera!" Y el guacho/a sacaba el culito y me decía: 'nada que ver, mirá, revisame toda'. Así que la palpé, imagínate, me quería matar, las personas que estaban mirando la secuencia en la calle y yo palpando a un puto... qué bizarro, por Dios!! En eso veo la billetera tirada en el piso '¡ahí está, vos la tiraste HDP!', 'nada que ver, nada que ver, naaada que... ', y huyó hacia el taxi".

En fin, lo mejor de la noche había ocurrido. En mi opinión, existen dos tipos de personas: las que a lo largo de su vida apenas suman un precario puñado de anécdotas, y las que le suceden las cosas más insólitas a cada momento, como si fueran los protagonistas de alguna película cómica o dramática y fueran vistos por algún extraterrestre desde el cielo.

Obviamente, comenzamos a elucubrar acerca de lo vivido y el torrente de gastadas no tardó en llegar: "pero cómo llegó hasta vos el trava? Se dijo: 'Mirá el ebrio éste que viene caminando en zig zag la pinta de gay que tiene".

Marce: "Lógicamente esta arreglado con el tachero, le roban a un boludo y se dividen el botín. Y sí, obvio, su radar ayuda, los travas detectan a quién le guste la pija a distancia".

La última gastada fue la conclusión más acertada de la noche teniendo en cuenta nuestro estado a esas altas horas de la madrugada: "Bueno Juan, perooo...se te fue el pedo o no??"

6:35 am: Juan nos miraba entre sonrisitas y exaltación, evidentemente no salía del asombro: "Sí, yo salí anestesiado de etílico y en medio segundo el trava me quitó toda la borrachera de un saque. Quedé de lujo, estoy re careta".

Listo: objetivo cumplido. Bizarro y feliz.

sábado, 18 de julio de 2009

Mielcitas

Ayer me encontré con mis compañeros del primario en una parrilla que queda llegando a Villa Urquiza. Algunos estaban igual, eran un calco de la infancia; otros, dejaban entrever alguna señal de lo que supieron ser. El resto, estaba totalmente irreconocible, eran individuos distintos...
Yo me quedé contenta con el típico ¡estás igual!!. Esa frase, pisando los treinta (bah, ya bien pisoteados), generaba una sonrisa instantánea en mi rostro y una simpatía única por quien me ofreciera tamaño piropo. Aparte cualquier falsedad sería consentida: ellos por mentir y yo por insistir en creerles...
En fin, el asado estuvo riquísimo y el encuentro superó las expectativas. Es más, quedamos en encontrarnos próximamente para hacer un patín sobre hielo!!
Obvio que al reunirnos pintó toda la onda retro y hablamos de programas de TV, música y juegos con los que rememoramos nuestra adorada infancia.
En total éramos ocho: seis chicas y dos chicos (no sé porqué, pero a dónde vaya las mujeres siempre somos multitud). Uno de los chicos trajo golosinas para todos: mielcitas!!! Siii, ya me había olvidado de las mielcitas! Siempre me gustaron estéticamente en sus variados y vivos colores, pero jamás fui de consumirlas demasiado porque me generaba impresión el estar lamiendo el envase y pensar al mismo tiempo que el kiosquero se tocó el culo cuando se disponía a colocarlas en el mostrador.
En un momento dado, no sé cómo (supongo que debido al vino ingerido), en medio de un popurrí de anécdotas, se me escapó el hecho de que a mis tiernos 19, entré a un puterío. Sí, a un puterío! Y pude ser testigo de los hechos que tienen lugar en dicho sitio vedado al sexo femenino (claro está: a no ser que labures como prostituta, barman o bailarina del caño).
En fin, con ese simple título: "yo fui a un puterío" me gané el silencio automático y atento de mis oyentes. En realidad, la cosa no era tan rara como sonaba si se sabe cómo llegué hasta ahí. La historia es simple: una tarde de calor, había ido con quién en aquel momento era mi novio, y con dos amigos suyos a ver a los Cadillacs. Era en uno de esos espectáculos al aire libre que se hacían en verano por Puerto Madero, creo que se llamaban "Buenos Aires Vivo", o algo así. Al salir, planteamos el tema de a dónde ir a tomar algo y la casualidad hizo que el amigo de mi ex novio tuviese un padre dueño de un cabarute. Así que, estábamos frente a la posibilidad de tomar lo que se nos antojara gratis y jugar pool hasta el hartazgo. Cuando me comentaron que se trataba de un puterío me dió un pequeño temblor, sentía que iba a estar fuera de lugar (lógicamente), pero al mismo tiempo sentía intriga. Era una oportunidad (tal vez la única) de meterme en un mundo netamente masculino y espiar por la rendija ese universo tan ajeno a la rutina femenina. Mi vena periodística se brotó y tuve curiosidad de saber por mi misma de qué se trataba todo ese antro machista, más allá de lo que se puede apreciar por los relatos de amigos o alguna que otra película. Así que fuí.
El lugar era bastante feito y precario. Había corazoncitos de colores pintados en las paredes, daba una sensación de berreta, de mal gusto. Abajo estaba el pool, por lo que nos quedamos ahí jugando y tomando algo mientras nadie nos jodía. Luego, subimos al primer piso que estaba mucho más oscuro y lleno de sillones. Las minas se paseaban semi desnudas por las mesas. Yo me pegué a mi novio y fuimos directo a la barra. El dueño nos dio una bienvenida a sonrisotas y desde atrás de la barra nos servía cualquier cosa que pidiéramos. Nos fuimos al rato. No había mucho para ver y ya había saciado mi curiosidad. El lugar no estaba bueno. Seguro hay puteríos mejores.
Cuando terminé mi relato mis compañeras se quedaron por unos segundos calladas. Me dije: "mierda! yo no las veo hace mil años, mirá si son las minas más puritanas y recatadas del universo!".
Traté de hacer reaccionar a Lorena, le pregunté si se había quedado mal (me parecía que no tenía mucho sentido, era una bobada).
Sin embargo, Lorena me miró, levantó sus cejas e inesperadamente, me dijo: "Eh?! naaaaah, que me voy a quedar mal, si yo también entré a puteríos, iba a vender CDs". Y cuando me empecé a sentir más normal, Lore se desató y escupió: "y los lugares swingers??? Esos donde van y se intercambian parejas! Yo fui ahí con Noelia, entrás y podés ver. Pete de acá, pete de allá, todo el mundo haciendo pete, un olor a pija terrible!!". Morí de risa. Cómo lo contaba merece un capítulo aparte, ella está para hacer stand up.  Claro, ahí mismo entendí que Lore no estaba ni ofendida, ni seria: Lore debía de estar aburrida!! Y, para mi mayor asombro, me recomendaba: "andá, no te cobran nada y te morís de la risa, vas entrás y mirás... a algunos les gusta que los miren" (¡¿?!) Too much. La última vez que la ví a Lore llevaba un guardapolvo blanco, una valija negra haciendo juego con unos anteojos a tono; y era tan tímida que casi no le conocí la voz en todo el primario. Claramente, aquella niña ya no está presente, por lo menos no en este relato.


Volví a mirar las mielcitas y se mezclaron sensaciones: esas golosinas que rememoraban una infancia y las charlas sobre puteríos avisándonos que crecimos. El contraste era importante.
Me fuí a casa y limpié las mielcitas con alcohol y las dispuse para verlas a trasluz y apreciar cómo se reflectaban en sus mil colores. Nosotros crecimos, pero las mielcitas se siguen vendiendo, están ahí recordándonos lo que fuimos, lindas y ricas... como la infancia.

miércoles, 8 de julio de 2009

Sobreviviendo a la gripe A

A pesar de la paranoia por la gripe A, una veintena de amigos se dignaron a pasar a saludarme por mi cumple en el bar. Yo había avisado, en tono irónico, que llevaría alcohol en gel con aloe vera y barbijos para repartir entre los valientes que se atreviesen a cruzar la línea que separa la salubridad de su hogar del infestado mundo exterior. Obvio, el primero en toser iba a morir, siendo previamente desterrado de nuestra taberna espirituosa y nocturna.
Muchos cobardes se quedaron encerrados en sus casas bajo los barrotes invisibles de la mente, perdidos en una sobre-información de ideas ajenas y contradictorias...

A mi no me importaba nada, yo cumplía 30 y había que festejar!!! No venía llevando bien el cambiazo de década y la idea de celebrar tenía el fin de contrarrestar la idea del suicidio. Al mismo tiempo que brindaba, mi inconsciente me fallaba y hacía tod
o lo que, se suponía, no debía hacer bajo la coyuntura de alerta nacional. Pero las cosas se dieron así y mi ánimo estaba tentando a la suerte: esa noche pasé por tres lugares públicos, intercambié fluidos salivales (la persona en cuestión parecía sanita y rozagante) y saludé a todos con abrazos y besos en la mejilla. Al día siguiente, por si no había hecho lo suficiente durante la jornada anterior, me metí en un teatro atestado de gente a ver un espectáculo de la danza del vientre.

Ya pasaron las 72 hs reglamentarias y me encuentro vivita y coleando, sin ningún síntoma, sin ninguna señal del barba por llevarme en un viaje eterno al más allá.

Sin embargo, mis amigos, los cobardes amontonados bajo el calor de su hogar, a la primera de cambio, yendo para el laburo en el subte se cruzaron con tantos microbios que no sé si estarán sugestionados, pero están todos con fiebre y engripados!!! Pobre gente! Y sí, la vida es una lotería!

Yo la pasé super bien, aparte la adrenalina de estar cara a cara con la muerte me hizo sentir más viva y jovial. Fue como la peli Cocoon, ese elixir que necesitaba para rejuvenecer un lustro y cambiar mi humor.

Gracias gripe A!!!! Mátame cuando quieras, pero déjame morir sintiéndome joven y espléndida!!!



sábado, 4 de julio de 2009

Los 30 llegan como trompada de loco...









Mi amigo el pizzero dice (10:18 p.m.):

Soleeeee!

El viernes pizzas?

sole dice (10:19 p.m.):

siii, ya leí el mail

buenísimo

después se viene mi cumple, el sábado siguiente

Mi amigo el pizzero dice (10:19 p.m.):

Grosa

sole dice (10:19 p.m.):

cambio de década!!!!

Mi amigo el pizzero dice (10:19 p.m.):

Perfecto

Mi amigo el pizzero dice (10:20 p.m.):

Pareces de 27, no te preocupes

sole dice (10:20 p.m.):

Graciasss!!!

Hay que saber llevar los años dignamente; por lo menos en lo físico, moralmente estoy para atrás...

Estoy con exámenes y no llego a preparar nada, pero algo improvisaré sobre la fecha, cae sábado

Mi amigo el pizzero dice (10:20 p.m.):

Rompemos todo

sole dice (10:21 p.m.):

yo ya dije, algo para contrarrestar el suicidio ;)

Algo bien arriba que no me dé tiempo a pensar: ebria all night!!

Mi amigo el pizzero dice dice (10:22 p.m.):

Quememos tu dni!

sole dice (10:23 p.m.):

Esa es buenísima, "la gran Chiquita Legrand"!!

(voy a armar un texto con este chat en el blog)

Mi amigo el pizzero dice (10:24 p.m.):

"Quemar el dni, esa es la cuestión"

sole dice (10:25 p.m.):

si, puede ser el titulo, eh?!

otro:"contrarrestar el suicidio"

Mi amigo el pizzero dice (10:25 p.m.):

Para, "los 30 van como piña".

sole dice (10:26 p.m.):

"cambio de década y el suicidio"

Mi amigo el pizzero dice (10:26 p.m.):

Nah, muy negativo

sole dice (10:26 p.m.):

es verdad. Se ve que no lo estoy procesando muy bien...

mi amigo el pizzero dice (10:26 p.m.):

No es grave el cambio de década

sole dice (10:26 p.m.):

"Los 30 van como piña". Esa es buena!

Mi amigo el pizzero dice (10:27 p.m.):

"los 30 llegan como trompada de loco"

sole dice (10:27 p.m.):

siii, eso eso eso!!!

Ejemplifica muy bien cómo me vengo sintiendo últimamente.

Es que los 30 te knockean...

Mi amigo el pizzero dice (10:27 p.m.):

Jajaja

sole dice (10:27 p.m.):

después hago una crónica de la party

diciendo como me mantuve ebria y anestesiada toda la noche

Marcos dice (10:27 p.m.):

Bueno, quiero leer el post

sole dice (10:27 p.m.):

y el día siguiente

Mi amigo el pizzero dice (10:28 p.m.):

Buscame un nick e incluíme en el relato

Puedo ser "el pizzero", que Willy ya me agarró para el viernes

sole dice (10:29 p.m.):

cuando termine con los parciales lo escribo de una!!

Vas a ser "mi amigo el pizzero"

Mi amigo el pizzero dice (10:29 p.m.):

Jaja perfecto

sole dice (10:29 p.m.):

bueno, me voy a estudiar, la seguimos el viernes en lo de Willy,

beso!

Mi amigo el pizzero dice (10:30 p.m.):

Beso amiga!


lunes, 29 de junio de 2009

Junio Mortífero

Terrible junio, ya van 4 bajas en este mes (baa..seguro hay más pero estas son las que recuerdo). No llegó a morirse Fernando Peña que ya estaba muerto Doria. Después, le llegó el turno a la chica de Los Ángeles de Charlie, aquella blonda de pelo ondulado (y eso que estaba a punto de casarse, su novio le había propuesto matrimonio y ella había aceptado gustosa: eso es amor!!!) Y cuando todavía no te habías recuperado de la vorágine de tragedias en cadena llega la peor de todas las noticias. Sí, la peor: murió Michael!!!!
Qué cagada, que junio de mierda...!! Uno sabía que Michael no era inmortal pero mirá que venir a morirse así, sin previo aviso. Bueno, y como Michael es un grande le embarró el homenaje al resto. No hay especiales televisivos para Peña y Farrah Fawcett cuando se acaba de morir el Rey del pop. Parece que todos se pelearan por cagarse el funeral.
En fin, Junio mortífero.

viernes, 26 de junio de 2009

Adios Moonwalker...

Michael, nooooo!!! Cómo?! Me acabo de enterar que te fuiste y siempre pensé que cuando esto ocurriera sería algo así como el fin de una era (es como que desaparezca Madonna o la Chiqui Legrand). Y vos, que tan sólo viniste una vez a la Argentina, allá por el '93 y yo, que nunca te fui a ver...

Las imágenes giran en mi cabeza, los recuerdos van y vienen y, con la extraña sensación de que se me ha arrebatado algo, ese shock que genera lo imprevisto, no puedo dejar de preguntarme: qué pasó con moonwalker? Qué pasó con las propagandas de Pepsi que estelarizabas cuando yo era una niña, esas que te dejaban millones en dólares y el pelo más lacio?! Y Thriller?!? El disco más vendido de todos los tiempos! Y ese video de culto, donde eras una especie
de zombi de películas de clase B, que se movía con sus secuaces al grito de "Thrilleeer, Thrilleeer"?! Qué pasó con el temón disco Don´t Stop till you get enough que supo hacerme mover en mis clases de danza jazz? Y con We are the world cantado a la par de Stevie Wonder, Cindy Lauper, Tina Turner, y otros tantos grandes... Era la época de los videoclips, del furor de MTV y las gigantes campañas de Coca-cola. Eran los tiempos de mi infancia, cuando miraba la pantalla del televisor y me quedaba embobada pensando que esos movimientos provenían de otro planeta. Ahora entiendo que no es tu persona la que se me ha arrebatado (nunca fui muy fan) sino esa parte de tu historia que se mezclaba con la mía a través de una pantalla de TV o del sonido de tu música en alguna fiesta o cumpleaños.

Comenzaste siendo tan sólo un niño negro cantando junto a sus otros cuatro hermanos en "The Jackson Five". Luego, ya solista, y (con una tez un tanto más clara) te convertiste en un icono de la música y de la cultura pop a la vez que tratabas de asimilar la locura de tener un mundo a tus pies.

Es cierto que fuiste preso de muchísimos rumores que rozaban lo diabólico, esas cosas que no se dicen cuando una persona ha muerto. Un manto de dudas se entretejió alrededor de tu figura y los medios del chimento no dejaron de regodearse con tanto morbo noticioso. Nunca se comprobará si fuiste un triste violín...

En el plano netamente artístico, nada borrará las vidas que tocaste (y no me refiero a la de Macaulay Culkin), toda una generación te recordará porque simplemente has hecho época. Es posible que, con tan poca perspectiva, todavía no caigamos en la cuenta de tu grandeza, pero estoy segura que nuestros nietos sabrán quién fue Michael Jackson.

Hasta siempre Maicol!! Yo seguiré (sin éxito) practicando el pasito de la luna frente a mi espejo…